El portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, dudó de que Canadá esté interesado en suministrar gas ruso a Europa porque se está preparando para ganar dinero con el suministro de gas natural licuado por sí mismo.
«¿Está Canadá interesado en arreglar la turbina [del Nord Stream]? Esa es una gran pregunta, porque por lo que sabemos, el propio Canadá se está preparando para empezar a producir y organizar el suministro de gas a los mercados mundiales, no está en absoluto interesado en que el gas provenga de Rusia», dijo a los periodistas Peskov.
Explicó que el gas ruso es «barato y Canadá, como EEUU, puede ganar mucho dinero con los europeos, con el gas natural licuado».
Peskov reiteró que Rusia cumple con sus obligaciones de pago por el tránsito de gas a través del territorio ucraniano.
«Seguimos pagando a los ucranianos por el tránsito a través del único tramo», dijo a periodistas al indicar que «sea agresor o no, [los ucranianos] siguen aceptando el dinero, y el pago se efectúa con éxito».
Por su parte, la compañía Siemens Energy aseguró que no puede devolver la turbina reparada para el gasoducto Nord Stream a Rusia, porque Gazprom no lo había solicitado oficialmente.
«Estamos muy interesados en devolver la turbina a Rusia con el apoyo del gobierno federal. Desde nuestro punto de vista, todos los documentos, documentos aduaneros (…) están preparados, pero necesitamos la participación del cliente, es decir, Gazprom. No lo observamos todavía. Por lo tanto, no podemos suministrar esta turbina, que lleva aquí más de una semana», dijo el director general de la empresa, Christian Bruch al reunirse con el canciller federal alemán, Olaf Scholz.
Scholz, por su parte, también afirmó que nada obstaculiza el envío de la turbina, pero señaló que «los destinatarios rusos deben notificar que desean recibirla y dar las instrucciones necesarias para el despacho de aduana».
A mediados de junio pasado, Rusia redujo en un 60% el suministro a través del gasoducto submarino Nord Stream 1, al desactivar tres motores en la estación de bombeo de Portóvaya.
Gazprom envió para la reparación una turbina en diciembre y esperaba recibirla de vuelta en mayo, pero las sanciones de Canadá impuestas a Rusia por la operación militar en Ucrania retrasaron su regreso.
Tras una serie de negociaciones, Berlín logró devolver el motor reparado y este se encuentra en el territorio alemán, mientras que Siemens y Gazprom están tratando de arreglar los problemas burocráticos para trasladar la turbina a Rusia.
Scholz, por su parte, también afirmó que nada obstaculiza el envío de la turbina, pero señaló que «los destinatarios rusos deben notificar que desean recibirla y dar las instrucciones necesarias para el despacho de aduana».
A mediados de junio pasado, Rusia redujo en un 60% el suministro a través del gasoducto submarino Nord Stream 1, al desactivar tres motores en la estación de bombeo de Portóvaya.
Gazprom envió para la reparación una turbina en diciembre y esperaba recibirla de vuelta en mayo, pero las sanciones de Canadá impuestas a Rusia por la operación militar en Ucrania retrasaron su regreso.
Tras una serie de negociaciones, Berlín logró devolver el motor reparado y este se encuentra en el territorio alemán, mientras que Siemens y Gazprom están tratando de arreglar los problemas burocráticos para trasladar la turbina a Rusia.