Mientras que Estados Unidos quiere dividir y gobernar Eurasia para desacelerar el declive de su hegemonía unipolar, Rusia quiere unir a todos para acelerar los procesos multipolares.
El jefe del Servicio de Inteligencia Exterior de Rusia (SVR), Serguéi Naryshkin, concedió una breve entrevista a la revista Defensa Nacional en la que explicó cómo ve el mundo. A su juicio, Occidente se ha visto debilitado a pesar de que el dólar sigue siendo la moneda universal. También dijo que el Sur Global se muestra receloso de recibir tecnología e inversiones de Occidente porque no quiere pagar por ellas con su soberanía . También son escépticos ante las iniciativas de Occidente y sus promesas de reforma global.
El ascenso histórico de la macrorregión euroasiática es paralelo al declive de Occidente. Allí los procesos multipolares son más activos que en cualquier otro lugar, por eso es el blanco de los planes occidentales de dividir y gobernar. Estos sólo servirán para facilitar la creación de una arquitectura de seguridad euroasiática que pueda garantizar la estabilidad en el supercontinente. La mayor amenaza en este momento es la guerra por delegación de la OTAN contra Rusia a través de Ucrania, pero la doctrina nuclear actualizada de Rusia hace imposible derrotarla estratégicamente.
La degradación profesional de la clase burocrática occidental es la responsable de que Occidente haya creído que podía derrotar estratégicamente a Rusia a través de Ucrania. Esta gente está obsesionada con conservar la hegemonía en declive de su bando a costa del nivel de vida de su pueblo. “Sólo los ignorantes o los sinvergüenzas son capaces de participar en un espectáculo político tan cínico”, añadió Naryshkin, burlándose de cómo han engañado a la gente para que crea que apoyar a Ucrania es lo que les conviene.
El artículo conjunto que sus homólogos estadounidense y británico publicaron en el Financial Times en septiembre “es también una prueba de que algo no funciona en la civilización occidental moderna”, ya que no intentarían justificar las actividades de sus organizaciones en la esfera pública si supuestamente todo marchaba según lo previsto. El resto de sus comentarios abordaron aspectos de la historia y el trabajo de su institución y consejos para futuros solicitantes. Todo lo que se compartió anteriormente se analizará ahora en un contexto más amplio.
Lo que sí se puede ver es que el SVR está convencido de que ciertas tendencias globales son irreversibles, a saber, la decadencia de Occidente y el ascenso de la macrorregión euroasiática, pero ninguna de ellas ha culminado aún, por lo que aún podrían producirse algunas sorpresas en el camino. De ahí la importancia de su labor de obtener información privilegiada sobre estas tendencias, incorporarla a sus análisis e informar a los responsables políticos sobre la forma más eficaz de promover los intereses nacionales de Rusia en estas circunstancias.
Sus palabras sobre la creación de una arquitectura de seguridad euroasiática son ciertamente ambiciosas, pero su importancia radica en que se trata del objetivo a largo plazo que Rusia aspira oficialmente a alcanzar, lo que requerirá mucho trabajo antes de que se logre algún progreso tangible. Por ejemplo, todavía hay mucha desconfianza entre China y la India a pesar de su naciente acercamiento , y eso sin mencionar la desconfianza entre la India y Pakistán o incluso hoy en día entre la India y Bangladesh después del cambio de régimen respaldado por Estados Unidos .
También está la disputa marítima chino-vietnamita no resuelta en el Mar de China Meridional, así como las persistentes sospechas que Irán y Arabia Saudita tienen entre sí a pesar del acercamiento de la primavera de 2023. Estos y otros problemas son desafíos hercúleos por sí solos, y más aún cuando se los agrupa en conjunto, pero Rusia tiene excelentes relaciones con ambos países en cada par de disputas, por lo que está bien posicionada para mediar o compartir sugerencias (sean solicitadas o no) para resolverlas.
Mientras que Estados Unidos quiere dividir y gobernar a Eurasia para frenar el declive de su hegemonía unipolar, Rusia quiere unir a todos para acelerar los procesos multipolares. Para ello, transmitir información sobre los planes de Estados Unidos a los países que son objeto de esas conspiraciones puede contribuir en gran medida a frustrarlos y a reforzar la confianza que Rusia necesita para ayudar a resolver políticamente sus disputas regionales. Este es el inestimable beneficio de asociarse con Rusia.
De cara al futuro, se espera que Rusia siga desempeñando un papel integral en la consolidación gradual de Eurasia como actor macrorregional en el orden mundial multipolar emergente, a través de sus medios militares para derrotar a la OTAN en Ucrania y de sus medios clandestinos, como se ha descrito anteriormente. Ningún otro país está desempeñando un papel similar, aunque eso no quiere decir que no sean importantes, sino que los medios económicos sólo pueden hacer mucho para acelerar estos procesos.
Cuanto más coordine Rusia sus funciones militares clandestinas con las funciones económicas que desempeñan China, India y otros Estados del Sur Global, más rápido se desarrollará todo. Por lo tanto, el marco Rusia-India-China (RIC) seguirá siendo el más crucial durante este período, seguido por los BRICS y la OCS en igual medida, dentro de los cuales el RIC es su eje central. Si el acercamiento chino-indio tiene éxito, que Rusia alentará pero en el que no se entrometerá , entonces el mundo cambiará radicalmente para mejor.
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*Andrew Korybko es analista político, periodista y colaborador habitual de varias revistas en línea, así como miembro del consejo de expertos del Instituto de Estudios y Predicciones Estratégicas de la Universidad Rusa de la Amistad de los Pueblos. Ha publicado varios trabajos en el campo de las guerras híbridas, entre ellos “Guerras híbridas: el enfoque adaptativo indirecto para el cambio de régimen” y “La ley de la guerra híbrida: el hemisferio oriental”.-BLOG DEL AUTOR: Andrew Korybko *
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