La comunidad de medios alternativos se volcó en promocionar los BRICS y la última Cumbre de Kazán.
Ha pasado más de una semana desde la última Cumbre de los BRICS en Kazán, por lo que ahora que se ha asentado el polvo es posible evaluar exactamente qué se logró. La principal conclusión es la Declaración de Kazán , que el Director General del prestigioso Consejo Ruso de Asuntos Internacionales (RIAC), Andrey Kortunov, describió como » un manifiesto para el nuevo orden mundial «. Su elogio no debe tomarse a la ligera, ya que es un realista arquetípico que también moderó anteriormente las expectativas sobre lo que los BRICS eran capaces de acordar.
En el artículo titulado “ Lo que los BRICS no pueden y lo que sí pueden ofrecer ”, Kortunov explicó que: “Los BRICS no pueden convertirse en un proyecto de integración económica global”; “Los BRICS no se convertirán en una alianza política o de seguridad multilateral de naturaleza antioccidental”; “No es probable que los BRICS contribuyan mucho a resolver disputas entre sus miembros o disputas entre sus miembros y terceros”; y “Los BRICS nunca se convertirán en un análogo del G7”.
Luego comparó estas evaluaciones con sus expectativas de que “los BRICS pueden promover el comercio y las inversiones entre sus miembros, así como contribuir al desarrollo económico y social de estos miembros”; “los BRICS podrían ayudar a dar forma a enfoques comunes no occidentales a los problemas globales”; “los BRICS son capaces de contribuir al diálogo de civilizaciones”; y “los BRICS pueden convertirse en una fuente importante de ideas y propuestas para la ONU, el G20 y otros organismos universales”.
Este contexto permite contextualizar la descripción que hace en la introducción, que se explicará a continuación. Según Kortunov, “por primera vez en la historia de los BRICS, la Declaración establece en detalle la visión compartida del grupo sobre el estado actual del sistema internacional, los enfoques comunes o superpuestos para abordar los problemas globales fundamentales de nuestro tiempo y las crisis regionales agudas, y los contornos de un orden mundial deseable y alcanzable tal como lo ven actualmente los miembros del grupo”.
Añadió que “si bien el documento no ofrece calendarios específicos para tareas individuales ni hojas de ruta para áreas de trabajo específicas, sí cubre una serie de objetivos clave que el grupo debería o podría perseguir en los próximos años”. En su evaluación, “existe un claro equilibrio entre las agendas de seguridad y desarrollo”, lo que considera una elección deliberada “para mantener su mandato muy amplio” en lugar de centrarse en asuntos puramente económicos y financieros.
Por ello, supuso que “los BRICS pretenden posicionarse como un laboratorio multitarea de gobernanza global, donde se puedan probar nuevos algoritmos de cooperación multilateral y modelos innovadores para resolver los principales problemas económicos y políticos del mundo, incluidos el comercio, las finanzas y la estabilidad estratégica”. Para ello, los BRICS están equilibrando entre la reforma del orden mundial centrado en Occidente y la creación de instituciones alternativas, y es esto último lo que más entusiasma a los entusiastas del grupo.
Antes de continuar, sin embargo, es importante aclarar algunas cuestiones. Putin declaró antes de la cumbre que no se está considerando actualmente una moneda común de los BRICS y luego dijo durante el evento que Rusia no está luchando contra el dólar. El portavoz del Kremlin, Peskov, agregó más tarde que los BRICS en su conjunto tampoco están tratando de derrotar al dólar y que su servicio de mensajería financiera no será una alternativa a SWIFT. Estos recordatorios de política llevan el análisis a discutir las tres principales iniciativas del grupo.
Sputnik publicó aquí una guía práctica sobre BRICS Bridge, BRICS Clear y BRICS Pay, que son, respectivamente, un servicio de mensajería financiera, un sistema de depósito independiente basado en blockchain y un servicio de pago sin efectivo. Como se escribió anteriormente, no pretenden reemplazar a sus antecesores occidentales, sino simplemente crear alternativas que otros puedan usar para protegerse contra el riesgo de que algún día Occidente utilice estas plataformas existentes como arma contra ellos, como lo hizo contra Rusia a partir de 2022.
Ninguna de ellas se ha puesto en marcha todavía, pero se ha avanzado en su creación y su eventual puesta en práctica durante la cumbre. Lo mismo se puede decir de las propuestas de Rusia de establecer bolsas de cereales y metales preciosos , que en teoría podrían ayudar a formar la base de una nueva moneda o al menos una unidad de cuenta común que algunos han llamado simplemente “ la unidad ”. Esta podría consistir en una combinación de materias primas y una cesta de monedas de los miembros, pero es probable que se necesiten años para llegar a un acuerdo, si es que se llega a algún acuerdo.
Mucho más exitosa fue la concesión del estatus de socio por parte de los BRICS a una docena de países, aunque todavía no se ha publicado una lista oficial, pero algunos países como Cuba ya celebraron haber recibido este estatus mientras que otros como Venezuela se mostraron molestos por no haberlo obtenido (en este caso debido al veto de Brasil ). Aun así, se explicó el mes pasado que “ la membresía o no membresía de los BRICS en realidad no es tan importante ”, en particular porque cualquier país puede coordinar voluntariamente sus políticas financieras con los BRICS.
En otras palabras, si bien esta distinción es prestigiosa y ser despreciado como lo fue Venezuela por Brasil es un profundo insulto, en realidad no importa si un país participa en las discusiones sobre los procesos de multipolaridad financiera como miembro oficial, como observador como socio o si se entera de los resultados después. Toda cooperación es voluntaria, de modo que cualquiera –ya sea miembro, socio o no asociado– puede implementar las propuestas de los BRICS o rechazarlas si considera que no satisfacen sus intereses nacionales.
Por lo tanto, dado que los vínculos con los BRICS no tienen importancia en ambos sentidos, la ampliación de la asociación con el grupo es puramente simbólica, lo que significa que no se acordó nada de importancia tangible durante la cumbre de la semana pasada. Lo mismo se puede decir de todas las cumbres anteriores, salvo la de Fortaleza en 2014, en la que los miembros acordaron crear el Nuevo Banco de Desarrollo (NDB), que es la única manifestación tangible de los esfuerzos de los BRICS por crear instituciones alternativas, pero también es claramente imperfecto.
En julio de 2023, la presidenta del NDB, Dilma Rousseff, confirmó que “el NDB reiteró que no está planeando nuevos proyectos en Rusia y que opera en cumplimiento de las restricciones aplicables a los mercados financieros y de capital internacionales”. En pocas palabras, el NDB, que la propia Rusia cofundó, cumple con las sanciones de Estados Unidos en su contra, lo que lo convierte en un complemento menos que una alternativa real a las instituciones occidentales. Esto también podría tener que ver con el hecho de que China, donde tiene su sede, cumple con la mayoría de las sanciones occidentales.
“ Los problemas de pago de Rusia y China provocados por Estados Unidos tomaron por sorpresa a la mayoría de los entusiastas del BRICS ”, después de que RT revelara el alcance de estos desafíos de larga data a principios de septiembre aquí, una vez que comenzaron a alcanzar proporciones críticas tras la última presión estadounidense sobre China en ese momento. Aunque se informa que India está desafiando estas restricciones y está en camino de convertirse en la tercera economía más grande del mundo para 2030 , sin que China haga lo mismo, los BRICS en su conjunto tendrán dificultades para crear instituciones verdaderamente alternativas.
China ha sido más cautelosa que India a la hora de provocar las sanciones secundarias con las que amenaza Estados Unidos, debido a que Estados Unidos la considera un rival sistémico, percepción que no quiere confirmar inadvertidamente, de ahí que haya cumplido con tantas sanciones hasta ahora. De hecho, el representante especial del presidente ruso para los asuntos de la OCS, Bakhtiyor Khakimov, reveló la semana pasada que su país ni siquiera puede pagar sus deudas porque el banco está ubicado en China y además solo utiliza dólares.
Si hubiera voluntad política, China ya habría ideado una solución alternativa en lugar de prolongar el asunto durante tanto tiempo que Khakimov se vio obligado a quejarse públicamente, lo que demuestra con qué rigor China cumple las sanciones en el seno de los BRICS e incluso en la OCS. Es cierto que el comercio bilateral sigue creciendo , por lo que se han creado algunos canales alternativos, pero aparentemente están segmentados en función de la industria (por ejemplo, energía, tecnología) y no facilitan los pagos a otros, como el NDB.
Si reflexionamos sobre todo lo que se compartió, tanto la visión de Kortunov como la que vino después, la última Cumbre del BRICS fue simbólica, como todas las anteriores, salvo la de 2014, que condujo a la creación del claramente imperfecto NDB. La naturaleza puramente voluntaria del BRICS significa que nunca se convertirá en lo que sus entusiastas esperan, ya que hay demasiadas asimetrías entre sus miembros. Tampoco hay ninguna posibilidad realista de que el BRICS haga obligatorio el cumplimiento de sus propuestas, ya que eso llevaría a su disolución.
Estas observaciones limitan en gran medida lo que los BRICS podrían lograr previsiblemente, pero no descartan la creación de instituciones más alternativas como las representadas por BRICS Bridge, BRICS Clear y BRICS Pay. También son posibles los intercambios de granos y metales preciosos, pero en esos casos, sólo sobre la base de acuerdos minilaterales dentro de los BRICS que luego reciben la marca del grupo después de que todos los demás están de acuerdo. Una moneda común de los BRICS o una unidad de cuenta común es un objetivo a mucho más largo plazo que es inalcanzable por ahora.
El decepcionante precedente que sentó el cumplimiento por parte del NDB de las sanciones estadounidenses hace que nos preguntemos hasta qué punto las instituciones mencionadas anteriormente, que Rusia también pretende cofundar, serán una verdadera alternativa. No hay duda de que Rusia aprendió de esa experiencia, por lo que nadie debería suponer que ya invirtió el tiempo y los recursos necesarios para crear esas nuevas instituciones sin idear antes una forma de evitar que también la sancionen, pero aún está por verse cómo funcionará esto.
La conclusión es que es mucho más fácil hablar de crear instituciones verdaderamente alternativas que hacerlo, lo que significa que los BRICS probablemente seguirán siendo un club de debate o un “laboratorio multitarea de gobernanza global”, como lo describió diplomáticamente Kortunov. No se trata de restarle importancia al papel del grupo, ya que es importante que los países no occidentales importantes y en desarrollo discutan cuestiones urgentes del orden mundial en evolución , especialmente las económicas y financieras, pero eso no es lo mismo que esperaban los entusiastas.
Al final, la comunidad de medios alternativos se excedió en la promoción de los BRICS y de la última cumbre de Kazán, pero de la primera no surgió nada de importancia tangible desde la decisión de 2014 de crear el claramente imperfecto NDB que luego sancionó a Rusia, mientras que la segunda no tuvo ningún resultado tangible. Esta última sí sentó las bases para la creación de más instituciones alternativas, aunque no está claro cuándo se darán a conocer y cómo Rusia se asegurará de que no la sancionen como terminó haciendo el NDB.
Por lo tanto, la Cumbre de Kazán no fue un fracaso y, de hecho, logró su único objetivo realista: reunir a sus miembros y socios para discutir formas de acelerar voluntariamente los procesos de multipolaridad financiera, por ejemplo mediante un mayor uso de las monedas nacionales. El resultado siempre iba a ser más simbólico que tangible debido a la naturaleza puramente voluntaria del grupo, aunque algunos observadores tenían falsas expectativas y, por lo tanto, se sienten amargados, pero ahora saben de qué se trata realmente el BRICS.
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*Andrew Korybko es analista político, periodista y colaborador habitual de varias revistas en línea, así como miembro del consejo de expertos del Instituto de Estudios y Predicciones Estratégicas de la Universidad Rusa de la Amistad de los Pueblos. Ha publicado varios trabajos en el campo de las guerras híbridas, entre ellos “Guerras híbridas: el enfoque adaptativo indirecto para el cambio de régimen” y “La ley de la guerra híbrida: el hemisferio oriental”.BLOG DEL AUTOR: Andrew Korybko
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