Managua, 5 ago (PL) La candidatura de la coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo, a la vicepresidencia de Nicaragua es considerada hoy por muchos como una victoria del pueblo, donde el protagonismo de la mujer gana espacios.
Así lo estiman mujeres comerciantes, trabajadoras y protagonistas de los programas de restitución de derechos que impulsa el gobierno sandinista, según declaraciones recogidas por El 19 Digital.
Para este segmento de la sociedad nicaragüense, marginado en gobiernos anteriores, la postulación de Murillo es una opción válida para seguir cambiando el país, pese a la reticencia de la oposición.
En ese sentido, la comerciante Yahaira Baltodano, citada por el referido medio de comunicación, aseguró que esos programas han cambiado la vida a miles de familias y Murillo es una de las más importantes impulsora de los mismos.
Asimismo, diversos sectores de la sociedad expresaron su respaldo a la coordinadora como fórmula del presidente Daniel Ortega para las elecciones generales previstas para el 6 de noviembre y a las que están convocadas más de 3,4 millones de nicaragüenses.
Y que muchos también consideran que Rosario Murillo impulsó con su trabajo y dedicación la reconciliación y unidad de las familias.
En ese sentido líderes religiosos coinciden en que Murillo es una mujer de pueblo y con profunda vocación de servir.
Igualmente, los jóvenes y estudiantes dieron muestras de apoyo y respaldo a la fórmula presidencial de la Alianza Unida Nicaragua Triunfa, liderada por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), al considerarse ampliamente representados y conscientes -según expresaron- de su rol de cara al futuro del país.
Por otra parte, el embajador de Cuba en Nicaragua, Eduardo Martínez, destacó a través de su cuenta en Facebook la candidatura de Murillo como fórmula de Ortega para las elecciones de noviembre.
Refiere que es cierto y necesario lo del papel de la mujer, es justo y correcto lo de la estructura ideológica y el rompimiento de viejos paradigmas, es innegable el tema de los méritos y capacidad de la persona.
Pero todo eso -agrega el diplomático- se quedaría corto si quien lo mereciera no gozara ya y desde hace rato de un reconocido y consolidado liderazgo político y social en este país.
Los liderazgos no se heredan, no se designan ni se ganan en competencia. Son el fruto de un arduo y prolongado trabajo, así como de habilidades, dones y sensibilidades que no siempre son explicables desde una simple y vulgar observación, puntualiza.
Quizás, expresa, por eso algunas personas apenas ven crecer el árbol y luego se asombran, o peor aún se atolondran cuanto este los sobrepasa y le ofrece su sombra.
A los que hemos tenido el privilegio de ver crecer ese liderazgo y nos identificamos con este modelo cristiano, socialista y solidario, nos llena de satisfacción y orgullo ser testigos de un momento tan trascendental para esta Nicaragua bendita y siempre libre, subraya.
Daniel Ortega y Rosario Murillo fueron inscritos el pasado martes ante el Consejo Supremo Electoral como la fórmula del FSLN para las elecciones generales de noviembre.
Ambos cuentan con un amplio respaldo popular, de acuerdo con la más reciente encuesta de firma M&R Consultores.
Según ese estudio, el presidente cuenta con el 82,2 por ciento de simpatías, mientras que Murillo suma un 82,8 por ciento de opiniones positivas.
El informe también recoge que el 67,3 por ciento de los nicaragüenses apoyan la gestión del jefe de Estado, al tiempo que un 78 opina que el gobierno sandinista toma en cuenta los intereses y las necesidades de la población.
A su vez, la muestra refleja que el FSLN se mantiene como el partido con mayores simpatías políticas en la nación.
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Prensa Bolivariana 