colombia-santosBogotá, 9 dic (PL) El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, afirmó hoy que valora el gesto de las insurgentes FARC-EP de pedir perdón por los sucesos de Bojayá en 2002, los cuales dejaron 79 muertos y más de un centenar de heridos.

Durante un acto en esta capital el mandatario aseguró que algo bueno está pasando en el país cuando el Estado, y al mismo tiempo ese grupo guerrillero, dan pasos certeros hacia la reconciliación y la plena realización de los derechos de las víctimas del conflicto interno.

Valoro como un hito necesario en la ruta de la paz el gesto de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), cuando el pasado domingo en la localidad chocoana de Bojayá reconocieron su parte de responsabilidad en esa tragedia, insistió el gobernante.

Esto lo registra el mundo con positivo asombro y genera consecuencias concretas, subrayó Santos desde la Casa de Nariño.

Integrantes de las FARC-EP viajaron hasta la localidad rural de Bojayá, en el departamento de Chocó, para admitir su culpabilidad en ese episodio acontecido 13 años atrás.

En medio de un combate con paramilitares un cilindro bomba lanzado por esa tropa rebelde cayó accidentalmente sobre la iglesia de Bellavista, en ese municipio, causando la muerte a familias reunidas en la parroquia.

Un grupo de guerrilleros, encabezados por el comandante Pastor Alape, ofreció excusas a los familiares de las víctimas en la misma catedral donde acaecieron los hechos, entre ellos huérfanos y viudas, así como heridos y habitantes quienes abandonaron el lugar para evadir los enfrentamientos.

En Bojayá se abona el terreno de la reconciliación para la paz, escribió Alape en su cuenta de Twitter.

Testigos recuerdan que aquella noche los paramilitares enfrentados a la guerrilla utilizaron la iglesia como escudo humano; los pobladores tampoco han olvidado que fueron muchas las alertas enviadas a la Fuerza Pública y distintas entidades estatales para que evitaran el trágico desenlace, pero nunca hubo respuesta, comentó el diario El Espectador.

El pasado 3 de septiembre la Sección Cuarta del Consejo de Estado confirmó la condena de la Nación por la mascare de Bojayá, el fallo pidió investigar la responsabilidad de la comandancia de las FARC-EP, del paramilitarismo, del propio presidente Andrés Pastrana y de la cadena de mando de las Fuerzas Militares, añadió el periódico de circulación nacional.

Durante la ceremonia en Chocó el Alto Comisionado para la Paz de Colombia, Sergio Jaramillo, aseguró que el Estado deberá reconocer igualmente su cuota de culpa en los acontecimientos, ya sea por acción u omisión, al igual que los paramilitares.

En tanto los residentes en esa demarcación pidieron la creación de una comisión de alto nivel, encabezada por el Ministerio del Interior, a fin de dar cumplimiento a una serie de solicitudes, entre ellas la identificación y entrega de los restos de los fallecidos.

Otra de las peticiones fue la construcción de un panteón y de una casa de la memoria.

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