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Caracas, 25 Oct. AVN.- El programa Con Cilia en Familia, que transmite Venezolana de Televisión, resaltó este domingo historias de varios colombianos que llegaron un día a Venezuela buscando un mejor futuro y con su trabajo y esfuerzo han ayudado al país a consolidación su paz y su progreso.

«Venezuela, pueblo noble, amplio y pluricultural, ofrece condiciones a los compatriotas colombianos que viven aquí por alguna u otra razón», expresó la primera combatiente, Cilia Flores, en el espacio televisivo.

Juan Carlos Tanus, nacido en el costero departamento de Sucre, en Colombia, y presidente de la Asociación de Colombianas y Colombianos en Venezuela, fue uno de los invitados a contar su historia.

«Venezuela me recibió en el 2004 muy bien (…) llegamos aquí a aprender y conocer, pero también con la esperanza de retornar, porque los que hemos salido siempre piensamos en retornar», dijo.

Contó que, como él, muchos de sus compatriotas llegaron al país justamente cuando se emitió el decreto de amnistía.

«En función de ese decreto vimos cómo ese conglomerado de hombres y mujeres migrantes carecían de instrumentos para la organización y ahí nació el proyecto de la Asociación de Inmigrantes Colombianos en Venezuela», indicó.

Con esta Asociación, señaló Tanus, «logramos una dinámica que en Colombia se nos negó y que, afortunadamente, gracias a las políticas del compañero comandante Hugo Chávez, logramos llegar en un momento a trabajar, y aquí estamos».

Otra historia es la de Luis Francisco Verano, quien tiene 14 años en Venezuela.

En 23 hectáreas de terreno ubicadas en Higuerote, estado Miranda, Verano siembra y produce naranjas, limones, cacao, aguacate, mango, plátano, moringa, plátano, entre otros alimentos.

«En el caso colombiano, el campesino para acceder a la tierra le es muy difícil y eso le ha costado la vida a cientos de miles, por luchar por la tierra, además de que nos han arrebatado millones de hectáreas que las estábamos trabajando, pero por la acción de la guerra hemos perdido ese derecho, pero hemos llegado a un país que dice: la tierra es de quien la trabaja», relató.

Próspero Camacho, otro colombiano, llegó al país en 2006, en 2008 creó una empresa de confección que en principio ubicó en Charallave, Miranda, y luego fue trasladada a Caracas.

«Venezuela es un país maravilloso para trabajar», aseveró, y por ello «hemos querido que este país salga adelante. Ustedes han estado apoyándonos con lo de la paz y queremos hacer algo por Venezuela los colombianos que estamos acá», expresó.