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Sao Paulo, 27 ago (PL) Principales candidatos presidenciales brasileños expusieron sus criterios y propuestas de campaña electoral en un primer debate televisivo que concluyó esta madrugada.

Casi tres horas fueron empleadas por siete pretendientes para exponer sus puntos de vistas sobre cómo mejorar la educación, la salud pública, la seguridad ciudadana, y garantizar el crecimiento económico del país.

La mayoría de las preguntas fueron dirigidas a las postulantes Marina Silva, de los socialistas del PSB, la mandataria Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT), y Aécio Neves, de la Social Democracia Brasileña (PSDB), que cuentan con mayor preferencia electoral.

Silva, quien reemplazo a Eduardo Campos, muerto en un accidente de avión el 13 último, abogó por impulsar una nueva política nacional, una reforma tributaria y garantizar la autonomía del Banco Central.

Sus propuestas fueron asimismo calificadas de incoherentes y contradictorias por Neves, y la también candidata Luciana Genro, de la agrupación Socialismo y Libertad (PSOL).

Genro llamó la atención de la postulante socialista por querer una nueva política con viejos figuras y buscar apoyo del PSDB y el PT de ganar la presidencia, así como asociarse a sectores financieros oligárquicos.

Al igual que Neves, Silva atacó los cuatro años de mandato de Rousseff al frente del país, al considerar que la economía crece muy poco y los sectores de educación y salud presentan graves problemas.

La jefa de Estado respondió con cifras que evidencian avances en la enseñanza y la salud pública y auguró otras mudanzas en estas esferas de ser reelegida.

Destacó asimismo que la economía sufre por los efectos negativos de la crisis internacional, pero a diferencia de Europa dijo que aquí el empleo y los ingresos continúan en aumento y la inflación no supera el límite fijada por el gobierno.

La ocasión fue aprovechada asimismo para conocer los programas de otros pretendientes presidenciales, como Genro, Everaldo Dias Pereira, de los Social Cristianos (PSC), Eduardo Jorge, de los Verdes (PV), y Levy Fidelix, de la organización Renovadora Laborista Brasileño (PRTB).

Este primer debate televisivo comenzó anoche, poco después de la difusión de una encuesta de Ibope, en la cual la dignataria brasileña aparece en el primer lugar con un 34 por ciento en la intención del voto, aunque con menor ventaja de Silva, quien acapara el 29 por ciento de respaldo popular.

En tercer lugar aparece el pretendiente del PSDB con el 19 por ciento de apoyo, lo cual confirma su descenso tras la incursión de la postulante del PSB.

Ibope muestra asimismo que en una eventual segunda vuelta entre Rousseff y Silva, la socialista conseguiría el 45 por ciento de apoyo, mientras la mandataria quedaría con un 36 por ciento en la intención del voto.