eeuu-militaresasesoresWashington, 14 jul (PL) El alto nivel de infiltración de las fuerzas insurgentes dentro del ejército iraquí representa un serio peligro para los asesores estadounidenses enviados allí por el Pentágono, señala hoy el diario The New York Times.

Funcionarios de la administración del presidente Barack Obama que prefirieron mantener el anonimato dijeron al periódico que solo la mitad de las unidades operacionales de ese país pueden asimilar con seguridad la asesoría norteamericana si Obama decide aumentar dicha asistencia.

Estas conclusiones, contenidas en un informe secreto elaborado por el Pentágono al que tuvieron acceso las fuentes, subrayan los desafíos que tiene Obama en sus intentos por confrontar al llamado Estado Islámico de Iraq y el Levante (EIIL) o Estado Islámico, añade el Times.

El documento de 120 páginas está bajo la revisión del general Lloyd Austin, jefe del Comando Central de las fuerzas armadas estadounidenses, que supervisa las operaciones del Pentágono en el Medio Oriente.

En el centro del debate en la Casa Blanca está si se envían o no más asesores castrenses, armamentos y sistemas de espionaje, y cuál sería su volumen, a qué costo y bajo qué probables riesgos, a un país como Iraq, actualmente al borde del colapso, considera la publicación.

Si Obama envía más asesores estadounidenses al país árabe, los expondrá a peligros que llevarían a una escalada en la participación norteamericana en el conflicto, pero la demora en tomar medidas pudiera limitar la capacidad de la administración para contrarrestar la actividad insurgente, añade.

Esa inacción tendría efectos negativos en los deseos de Washington de influir en la formación de un gobierno más inclusivo en Bagdad.

Por su parte, el vocero del Pentágono, almirante John F. Kirby, declinó este domingo comentar sobre el contenido del informe y señaló que «aunque el trabajo inicial de los grupos militares de evaluación en Iraq está terminado, todavía sus conclusiones finales son revisadas por altos jefes civiles y militares».

Tras producirse el avance de las agrupaciones del EIIL, el mando militar estadounidense envió a territorio iraquí seis grupos de las Fuerzas de Operaciones Especiales, unidades élites del Pentágono, para evaluar en el terreno la situación de las unidades gubernamentales.

Esta evaluación, que demoró dos semanas, subrayó las fortalezas y debilidades de las unidades hasta el nivel de brigada de infantería, al examinar el estado de su equipamiento, municiones, composición étnica, moral, liderazgo y otros indicadores, asevera el Times.