Puerto Ordaz, 27 Mar. AVN.- En la tierra bolivarense, conocida por su aporte en la producción minera al país, la selección nacional de fútbol de mayores consiguió oro tras vencer en un peleado partido 1 gol por 0 a su similar de Colombia, tres puntos vitales que mantienen intacto el sueño de clasificar al Mundial de la especialidad, que el próximo año se realizará en Brasil.
Luego del gancho al hígado que significó la dura derrota ante Argentina tres días atrás, el equipo venezolano «sacó el pecho» ante un rival peligroso, como lo predijo el seleccionador criollo César Farías, y cual boxeador que besa la lona, se levantó del golpe para salir victorioso.
Los fuegos artificiales retumbaron en lo alto del estadio Cachamay provocando la explosión emotiva de los casi 40 mil aficionados presentes e iluminaron el cielo de Puerto Ordaz, segundos después de que el juez central diera silbatazo final que materializó el lauro vinotinto.
La adrenalina por el triunfo hizo que cientos de espontáneos saltarán al césped para festejar el merecido lauro, que dejó a la Vinotinto con cuatro victorias, tres empates y cuatro derrotas, para 15 puntos en total, que la ubican en la cuarta casilla de la tabla clasificatoria empatada con Chile.
Decimos oro porque fue una victoria luchada y ganada a lo bravo, con orden y oficio defensivo y mucha concentración; no una victoria decisiva, puesto no eliminaba o menos aún clasificaba a la justa mundialista, pero que inyectó una gran dosis de motivación pues se superó con buen fútbol a uno de los equipos más engranados y contundentes de Surámerica en la actualidad.
El combinado de Venezuela, se fue arriba en la pizarra, pero luego se dejó quitar la iniciativa en la primera mitad. No obstante, salió en el segundo tiempo con una mentalidad ganadora, se hizo con la pelota y construyó un muro infranqueable en la zaga que sirvió para cortar la racha de cuatro victorias de Colombia.
Dejó sin goles a un combinado que promedió hasta este martes más de 3 goles por choque. La maquinaria goleadora neogranadina fue detenida por la efectiva zaga vinotinto, ayudada por el sacrificio de Rondón y Arango.
«La clave del triunfo fue el orden y mantener esa garra intacta», consideró el lateral izquierdo Gabriel Cichero, jugador del Nantes francés.
El delantero Salomón Rondón, caraqueño que juega en el Rubin Kazan ruso, fue el artífice de marcar la única diana del compromiso. Un tanto que hizo reventar las miles de gargantas de los aficionados que deliraron como locos por el gol del dorsal 23 vinotinto, su cuarto tanto con la camiseta patria en este premundial.
El gol del muchacho de Catia se gestó por la banda izquierda. El capitán Juan Arango, excelso pasador, levantó la visual, detectó a Rondón y conectó con él un pase que el exariete del Málaga español recibió muy bien.
Utilizando su olfato de anotador se fue en busca de la portería colombiana, con su fuerza física desplazó al defensor Luis Perea que intentó detenerlo y sacó disparó de pierna izquierda que pasó por arriba y a la derecha del arquero David Ospina que terminó por incrustarse en las redes. Corría el minuto 13 del primer tiempo.
Aunque el juego fue duro, de ida y vuelta, hubo muchas ocasiones de alterar el marcador, ambas oncenas fallaron.
Los delanteros nativos Fernando Aristeguieta y Nicolás Fedor tuvieron opciones que no concretaron, mientras la más clara la tuvo de cabeza el delantero del Atlético de Madrid, Radamel Falcao por los cafeteros, pero el palo horizontal le negó la celebración.
«Este partido no era definitivo, sino significativo para lo que se está construyendo que es el camino a Brasil. Todavía quedan partidos aquí en casa y son puntos importantes. Vamos por el camino correcto. Tenemos que remar en esa dirección», analizó Rondón.
Un hombre que luchó en el mediocampo quitando pelotas y metiendo el físico alabó el corazón del once vinotinto.
«Una vez más le dimos la cara a la adversidad y es algo que esta selección a demostrado y hoy (martes) hemos vuelto a ser el equipo que ha ilusionado a todo el país. Había que ganar como fuera y hoy lo hicimos», dijo Tomás Rincón desde la zona mixta del CTE Cachamay.
«Era obligatorio ganar los tres puntos. Era una exigencia que teníamos con un país», acotó por su parte Franklyn Lucena, que inició como volante de salida y luego bajó a la zaga central.
Un triunfo de hombres calificó la gesta Rincón: «Estos partidos son para machos, había que salir con diente apretado. Era un partido complicado, sabíamos que se podía ganar o perder y ganamos».
«Feliz por la entrega del grupo. Es lo que nos lleva a la victoria de hoy», destacó lucena.
«La celebración (en vestuarios) fue increíble, fue una alegría para nuestro país, para nuestra familia. Todavía falta mucho aún no se ha ganado nada», razonó César González, un volante que creó jugadas de peligro.
El último juego entre criollos y neogranadinos ocurrió el 11 de septiembre de 2011 y fue empate 1-1 en Barranquilla; y el último choque en Cachamay se realizó el 31 de marzo de 2009 con triunfo vinotinto gracias a goles de Arango y Fedor.
Históricamente en premundiales, Venezuela y Colombia se han medido 14 veces. Todavía domina el cuadro el equipo neogranadino con seis victorias, cinco empates y tres conquistas para el once vinotinto.
Tras este juego restan cinco encuentros para Venezuela, tres de ellos como local y deberá enfrentar a Uruguay, Perú y Paraguay.
Alineaciones:
Venezuela: Dani Hernández, Andrés Túñez, Oswaldo Vizcarrondo, Gabriel Cichero, Tomás Rincón, Franklin Lucena, Alexander González, César González, Juan Arango ©, Fernando Ariteguieta y Salomón Rondón. Director técnico: César Farías.
Colombia: Davis Ospina, Juan Cuadrado, Carlos Valdés, Luis Perea ©, Camilo Zuñiga, Edwin Valencia, Abel Aguilar, Pablo Armero, Macnelly Torres, Radamel Falcao y James Rodríguez. Director técnico: José Pékerman.
Prensa Bolivariana 