Lima, 4 jun (PL) La parlamentaria peruana Verónika Mendoza renunció hoy al gobernante Partido Nacionalista por la represión a la protesta de la provincia centroandina de Espinar y por lo que considera continuismo neoliberal del ejecutivo.

En una declaración publicada en su página de Internet, la legisladora de la región de Cusco -de la que forma parte Espinar- afirma que se mantiene fiel al proyecto político transformador que llevó a su partido y al frente Gana Perú al gobierno.

Mendoza responsabiliza directamente al primer ministro, Oscar Valdés, y al titular del interior, Wilver Calle, por la represión a la huelga de la población de Espinar, con un saldo de dos civiles muertos.

Lamenta, además, que el gobierno haya refrendado ataques de la prensa conservadora que le imputan haber provocado ese conflicto al difundir un informe del Ministerio de Salud sobre la contaminación de un río de Espinar.

La diputada considera que era inminente su expulsión de la bancada oficialista por su posición a favor de la protesta de Espinar y, al mismo tiempo, condena los excesos de violencia de manifestantes durante al huelga.

Acota que el problema que determina su renuncia no es personal sino político y argumenta que «el modelo económico neoliberal que tanto denunciamos sigue intacto, ya nadie lo cuestiona siquiera» en el gobierno.

«Los grupos de poder mantienen sus redes de influencia en diversos niveles de gobierno, se empieza a criminalizar la protesta y a descalificar a todos aquellos que ejercen su legítimo derecho a la protesta adjetivándolos como radicales, extremistas, agrega.

Mendoza dice que tal situación le recuerda «cómo nos descalificaba la derecha cuando, como Partido Nacionalista, salíamos a respaldar las demandas del pueblo».

«Me sumo a todos aquellos que siguen creyendo que otro Perú es posible, con solidaridad, justicia y paz social», asegura.

El retiro de Mendoza se suma a la expulsión de Gana Perú, semanas atrás, del congresista Jorge Rimarachín, por apoyar la protesta de frentes sociales de Cajamarca contra un proyecto minero aurífero de capital mayoritariamente estadounidense.

Diversos medios de prensa consideran posible que también renuncien los legisladores de Cusco Rubén Coa y Hernán de la Torre, quienes pidieron la semana pasada con Mendoza el retiro del gobierno del primer ministro Valdés tras la detención del alcalde de Espinar, Oscar Mollohuanca, a quien un juez envió a prisión por cinco meses, mientras es investigado por varios cargos.

Esos órganos de prensa alientan desde hace semanas la salida de legisladores progresistas de Gana Perú y la formación de una nueva coalición parlamentaria oficlalista con fuerzas conservadoras, a lo que se han ofrecen estas.

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